El fin de semana se realizó una nueva versión de la feria Cosmosalón, evento internacional que reúne lo mejor de la peluquería, manicure y estética en general.

Hay varias cosas que quiero mencionar, pero sin el afán de hacer una crítica sin sentido, sino porque a mi me encantan estos eventos de belleza y como visitante, siempre espero que sean entretenidos y novedosos.
Al llegar el día sábado para acreditarme como prensa, el ingreso era un caos porque era el mismo para el público general y para los medios. Por suerte, mi hermana y yo pudimos entrar de inmediato. Yo no aparecía en el registro de prensa, pero pudieron solucionar esto de manera oportuna y rápida.

Al ingresar, con mi hermana nos sentimos parte de un viaje en el tiempo, porque fue como estar en la versión del 2012: los stands eran casi los mismos (salvo excepciones) y la distribución en el recinto no difería mucho de las versiones anteriores.
El año pasado no hubo Cosmosalón. Desconozco la razón de esto, pero muchas personas nos quedamos con las ganas de poder asistir a la feria. Es por eso que este año tenía altas expectativas al respecto, expectativas que fueron mermadas apenas entré.
Al acercarnos al stand de Pichara, uno de los más grandes y notorios de la feria, pudimos verque los productos capilares en oferta eran sólo cuatro, ya que priorizaron la venta de artículos eléctricos y tijeras por sobre los shampoos y acondicionadores de la tienda. Entiendo perfectamente que esto puede ser beneficioso para los profesionales de peluquería , pero también hay que considerar que ésta es una feria abierta a todo publico: personas que no tenemos relación con el mundo profesional, pero que sí tenemos gran interés por los productos para el cabello y la belleza en general.

Lo mismo ocurría con Intersalón, otro gran stand que tenía los productos Babyliss como foco de atención y demostraciones del uso de Miracurl y el ondulador sin tenaza que tenía un súper descuento de $5.000. No había Paul Mitchell, Proclaim ni ninguna de las otras marcas de la tienda.

Cuando llegaron mis amigas, dimos una vuelta y concordamos en lo aburrida que estaba la feria. Sólo una de ellas aprovechó el descuento de Pichara y el del pack de Oro Fluido, pero también esperaba poder probar más cosas.
Decidimos salir a almorzar y regresamos en la tarde. En el salón principal nos encontramos con el desfile inaugural en el que las modelos salían a la pasarela acompañadas de unos perros muy lindos, pero asustados con tanta luz y gente. Uno de estos perros recibió una pulverización de laca por parte de uno de los estilistas que acompañaba en pasarela a la modelo para finalizar su look. Nos espantamos al ver esto y pensamos que había sido muy idiota de su parte.
En la tarde hacía mucho frío, claramente por el clima de ese día y también porque la Estación Mapocho es un témpano de hielo. El paseo por el recinto no fue agradable por esta misma razón. Tal vez, invertir en un par de calefactores no sea mala idea para el próximo año.

Así terminamos la jornada del sábado: desilusionadas y aburridas de ver lo mismo de siempre. Ni siquiera tuve ganas de sacar fotos.
El día lunes en la mañana regresé para ver si la situación cambiaba un poco, pero no. Todo seguía igual, mucha entrega de folletos informativos, pero casi nula posibilidad de probar productos, ya fuera mediante muestras o porque tenían los testers ahí. No sé ustedes, pero a mi un folleto no me va a convencer de probar algo nuevo. Por lo tanto, no va a generar una compra de mi parte. . Creo que hay marcas que deben replantear sus estrategias de venta.

Por otra parte, sí destaco la gran oferta de productos para manicure que había: buenos precios y excelentes marcas para las interesadas del área, pero en ese caso, hagan una feria especial para ello, porque la diferencia entre stands se notó demasiado.
En fin. Espero que la próxima versión esté a la altura, porque sigo pensando que la edición del 2011 ha sido la mejor y más entretenida, al menos de las que he asistido.

¿Fuiste a Cosmosalón este año? ¿Cuál es tu opinión al respecto?