Después de dos semanas (y de tener un virus que me mantuvo con licencia por unos días) procedo a mostrarles mi corte de cabello. Les advierto que tal vez no es el gran cambio radical que esperaban y que las dejará con la boca abierta. No, para nada. Sí debo decir que me quité como un año y medio de largo ¡y que se siente muy bien!

En esta oportunidad, María José fue quien cortó mi pelo. Llevé fotos de referencia y le expliqué muy bien lo que quería: que el pelo me llegara a la mitad de la espalda y que las puntas, tuvieran movimiento.

María José cortó el largo necesario y después de eso, lavó mi pelo para dejarlo listo para el corte. Ella me indicaba a cada momento cuanto cortaba, para que no hubiera dudas al respecto. Incluso ¡en un momento le pedí que cortara más!. Cuando finalizó, secó mi pelo y lo onduló con plancha. ¡Yo quedé feliz! Las dos veces que María José ha cortado mi pelo, lo ha hecho maravillosamente y tal, y como les conté en otra oportunidad, hasta ha crecido más rápido.

Lo que me gusta de este corte es que me permite peinarme sin problemas, me es más fácil ondular mi pelo y las trenzas quedan mejor, porque no tengo que usar tantas horquillas para sujetar toda la masa de pelo que tenía encima.

Ahora, muchas se preguntarán por qué tomé esta decisión. Bien, sentía que luego de tener el pelo extra largo por tanto tiempo, ya era suficiente. ¡Necesitaba cambiar! Los cambios hacen bien y con el tiempo he aprendido que hay que dejar el miedo de lado y atreverse un poco más. También, debo admitir que sentía que mi pelo estaba absorbiendo malas energías (creo mucho en esas cosas medias esotéricas) y que era bueno empezar casi de cero. Además, hay cosas que me tienen muy contenta y que tienen relación con el plano familiar, así que el corte encaja perfectamente con todo esto. Sí se lo preguntan, no estoy embarazada.

El 26 tengo mi cita para hacerme el balayage nuevamente y quien sabe, tal vez de aquí a fin de año (o ese mismo día) corte un par de centímetros más.

Total, estoy dispuesta a probar.

Varias me han preguntado por La Pelu de Ale. Debo decirles que yo no hubiese aceptado ser embajadora de un lugar que no me produjera confianza. Por eso ¡los recomiendo a ojos cerrados! La atención es muy personalizada, el ambiente es muy relajado y se nota que el staff que es parte de él sabe lo que hace. Eso me encanta y no lo he visto en todas las peluquerías que he visitado. Por eso, cualquier duda que tengan, pueden aclararla en las redes sociales de La Pelu de Ale, ya sea en su Facebook e Instagram .

¿Quieres cortar tu pelo porque necesitas un cambio?